miércoles, 24 de octubre de 2012

“Guardianes de las lagunas” empiezan a sentir efectos del mal tiempo en Conga



* Varias comuneras fueron evacuadas, pero el resto permanecerá firmes hasta la victoria final.

Al entrar a la tercera semana de estar en un campamento armando con plásticos y madera de la zona y bajo alimentos compartidos de una olla común, unos 500 campesinos de Celendín, empiezan a sentir la crudeza del mal tiempo que impera a los 4,100 m.s.n.m, en las cercanías de la laguna Azul, una de las cuatro que Minas Conga podría desaparecer si lleva adelante el proyecto al que se oponen férreamente miles de campesinos.

“Hace cuatro días hemos evacuado a tres compañeras con resfríos y malestar general, por nuestros propios medios porque la policía impidió que lo hiciéramos a través de la ambulancia de Hualgayoc”, reveló Milton Sánchez, presidente de la Plataforma Institucional Celendín, que permanece en la zona desde el primer día de la resistencia pacífica (8 de octubre). 
En diálogo telefónico con La República, el dirigente, reconoció que exponen sus vidas en esas alturas, pero están decididos a mantenerse frente a la laguna Azul hasta que el gobierno desista de la implementación del proyecto.
“En la laguna Azul nace el río Jadibamba (distrito de Huasmín), reclamamos la presencia de los cajamarquinos en las alturas, para que sean correspondidos como el 2004 cuando cientos de celendinos apoyamos la defensa del cerro Quilish; porque de alguna manera Cajamarca también será impactada”, recordó algo dolido por la indiferencia del pueblo cajamarquino.
Sánchez, criticó la actitud de unos 600 efectivos de la DINOES con quienes están mirándose la cara, porque instiga a la población con el ánimo de atemorizarlos, “nosotros no provocamos ninguna reacción, sino protestamos de manera pacífica, ni invadimos la propiedad de la mina, estamos en el terreno de un comunero que no ha vendido sus tierras a la mina”.
Reveló que permanentemente las fuerzas del orden bloquean los tramos entre los campamento de Celendín y Bambamarca, y por las noches prenden luminarias para cegarlos, mientras ellos descansan en los buses de minera Yanacocha, a unos cien metros.
El martes –apuntó- rodearon el campamento con armas de largo alcance, lanza bomba lacrimógenas, pretendiendo desalojarnos, el miércoles quisieron que bajemos la bandera del Perú y la bandera verde ecológica, pero nos resistimos.
Denunció que ayer, las delegaciones que venían al campamento de Celendín, fueron retenidas y un policía disparó a la llanta de la camioneta del alcalde de Huasmín, José Marín Agusti, y al periodista de radio Coremarca, César Estrada, le decomisaron sus equipos.
Interesados en conocer la versión del jefe del Frente Policial de Cajamarca, general PNP Orlando Del Águila Cabanillas, este diario lo buscó, pero se encontraba en una reunión de trabajo en la sede de la Sanidad.