jueves, 5 de julio de 2012

No se detiene el baño de sangre, son cuatro los muertos por Conga


* Policía actúa con ferocidad al detener a padre Arana.
* Población desafía estado de emergencia y fuerzas del orden los reprime duramente.
* Violencia se traslada a Bambamarca y en Celendín retorna la calma.

A cuatro subieron los muertos durante manifestaciones contra el proyecto Conga, en la provincia de Bambamarca. La policía ultimó de un balazo a Joselito Vásquez Jamo (27), durante la refriega en las inmediaciones de la plaza de armas; además la revuelta dejó una docena de heridos civiles y dos miembros de las fuerzas del orden heridos por cohetes. Anteayer en Celendín, tres fueron las personas que cayeron bajo las balas policiales.
En tanto en una acción injustificable, al mediodía de ayer, un contingente policial detuvo al líder medioambientalista, el sacerdote Marco Arana Zegarra, mientras descansaba en una de las bancas de la plaza de armas de Cajamarca, propinándole una feroz golpiza en el suelo y conduciéndolo al departamento de Seguridad del Estado.
Arana, llegó al centro histórico al promediar el mediodía y se detuvo a conversar con dos parroquianos sentándose frente a la Iglesia San Francisco. En esos instantes, sin mediar palabra alguna, los policías lo alzaron a viva fuerza, mientras el líder de Tierra y Libertad, luchaba por zafarse de una “llave” al cuello que le aplicó uno de sus captores, exigiendo, no le peguen.
Para evitar el trabajo de la prensa, el cordón policial, protegió con sus escudos el maltrato al cura, pretendiendo ocultar el hecho. Evidentemente no lo consiguieron.
A empellones lo subieron a una camioneta trasladándolo a la sede central policial ubicada en la plazuela Amalia Puga.
Hasta allí se constituyó un grupo de gente mostrando su solidaridad con Arana, exigiendo su inmediata libertad.
Hasta el cierre del despacho se esperaba el inminente traslado en helicóptero del sacerdote a Chiclayo, conjuntamente con 18 detenidos de la revuelta en Celendín.
A la 1.10 de la tarde a bordo de un avión de la PNP, arribó el director general de esa institución general PNP Raúl Salazar Salazar, bajo estrictas medidas de seguridad. El alto oficial observa el interrogatorio al cual es sometido Arana.
Mañana caliente
Mientras que en Celendín, retornaba la calma, tras la muerte de tres personas por protestar contra minas Conga, y tanto la policía como el Ejército tenían bajo control la ciudad; en Bambamarca, al igual que en Cajamarca, se desató la violencia, por el desacato de la población al estado de emergencia decretado por el gobierno, que prohíbe entre otras libertades, la de reunión.
En ambas provincias durante varias horas la policía recurrió a las bombas lacrimógenas y perdigones para dispersar a pequeños grupos que iban y venían en el centro histórico. En Bambamarca, cayó una nueva víctima.
Llegan más refuerzos
A bordo de dos aviones de la Marina de Guerra, alrededor de doscientos efectivos llegaron para reforzar el fuerte contingente de las fuerzas armadas y policiales, e inmediatamente se dirigieron a las provincias declaradas en emergencia: Cajamarca, Hualgayoc y Celendín. La Fuerza Aérea, se encarga de proteger las instalaciones del aeropuerto Armando Revoredo Iglesias, en donde se han levantados campamentos militares.
De vuelta a casa
Apenas entró en vigencia el estado de excepción en esta capital, escuadrones de la DINOES, “barrieron” con los cientos de campesinos que durante más de un mes soportaron la inclemencia del frío pernoctando en precarias carpas de plástico en la plazuela de la iglesia San Francisco, que ayer lucía vacía. El mismo panorama se observó en la plazuela Bolognesi, donde se preparaban ollas comunes.
El largo peregrinaje a casa empezó con el dolor a cuestas de no celebrar una exitosa lucha para impedir la realización del proyecto cuprífero Conga.
A Celendín, se constituyó el responsable de la Oficina Defensorial de Cajamarca, Agustín Moreno, para impedir que continúen actos de violencia, así como verificar la atención de heridos. Permanecerá unos días conforme se desenvuelva el conflicto, dijo a La República.
Hasta el momento no se conoce de ningún pronunciamiento de los dirigentes del Comando Unitario de Lucha y menos del presidente regional, Gregorio Santos Guerrero.
Debido a que varios alumnos resultaron afectados por los gases lacrimógenos en el primer día de estado de emergencia decretado en Cajamarca y en las provincias de Celendín y Hualgayoc, el Director Regional de Educación, César Flores Berríos, exigió el retiro de las fuerzas del orden cerca a las instituciones educativas.
Al cierre del despacho, 15 policías detenidos por las rondas en el centro poblado de Maraybamba, distrito de Llaucán (Bambamarca), fueron liberados sanos y salvos.