Apenas fue proclamado por el Tribunal Nacional Electoral del APRA, como presidente del Tribunal Regional de Etica y Moral, Pedro Romel Figueroa Gutiérrez, anunció que iniciará la recuperación de los ideales de Víctor Raúl Haya de la Torre en la militancia cajamarquina,
Simultáneamente, dijo, empezará una poda de las ramas podridas que existe en el viejo partido que se resiste a caer en las garras de las corrupción, y que bajo el liderazgo del reelecto secretario regional, Jorge Arroyo Reto, poco o nada hizo por devolverle la mística que siempre caracterizó al aprismo.
Voy a exigir –prometió- que Arroyo rinda cuentas económicas del aporte de la militancia para despejar las dudas que rodea a su gestión; porque no podemos estar en boca de todo el mundo.
“He dedicado 30 años de mi vida a llevar con altura y la frente en alto el aprismo, y así tenga que enfrentar a los grandes dirigentes, le devolveré el prestigio que jamás debió perder”, finalizó Figueroa.
