Los más de doscientos conflictos sociales que hereda el gobierno entrante de Ollanta Humala, no amilana para nada el titular de la Región Cajamarca, Gregorio Santos Guerrero, quien tras su reunión con el presidente electo llegó convencido que las regiones conjuntamente con el gobierno central están en la capacidad de darle una rápida respuesta y buscar solucionarlos.
“Durante la reunión con Ollanta, nos solicitó a los presidentes regionales, gobernar el Perú juntos y asumir nuestras responsabilidades de gobierno, cumpliendo tres cosas: que gobernemos con calidad de la inversión, luchar frontalmente contra la corrupción y buscar la gobernabilidad del país, y él se ha comprometido que la distribución del crecimiento económico se haga en función de los cambios constitucionales y tributarios”, dijo entusiasmado al recordar el fuerte abrazo que le tributó Humala.
Otro de los ofrecimientos que recuerda, es que habrá la ley de consulta con lo cual se solucionaría un centenar de conflictos y trabajar con la asamblea de gobiernos regionales.
Los conflictos sociales –afirmó con entusiasmo- lo vamos a resolver desde el nivel de los tres gobiernos, para evitar que estallen; Humala expresa esa voluntad de escuchar a los gobiernos regionales, y paso a paso se irán resolviendo estos temas.
“Goyo” Santos, con firmeza sostuvo que el gobierno nacional tiene que consultar con las regiones y los gobiernos locales que están más cercano a las concesiones, y lo que se tiene que hacer si es necesario de revisar todas la concesiones mineras, hay que hacerlas y dar el proceso normal, legal, de consulta e información transparente y sobre esa base determinar qué proyectos nacionales se hacen y con eso vamos a superar la conflictividad social.
Cuando La República, conjeturó, que la consulta previa ya tiene una respuesta porque las comunidades no quieren saber nada con la minería, Santos, admitió que probablemente sea en algunos lugares, pero la consulta previa informada tiene varios mecanismos, “cuando el gobierno haga una verdadera explicación sobre las condiciones favorables y el prejuicio de la minería, cuando hay buena información probablemente las comunidades acepten, pero cuando lo hacen a escondidas, a medianoche, con audiencias públicas falsas, la gente va a reaccionar y no te va a permitir ningún proyecto”.
