Al menos en esta región, la Oficina Departamental de Procesos Electorales (ODPE) Cajamarca, dejó prácticamente todo listo para que los ciudadanos acudan el próximo 5 de junio a cumplir con su deber cívico y con su voto elegir al presidente de la República, que gobernará a partir del 28 de julio durante cinco años.
Como ya es habitual en esta población andina, se espera que desde muy temprano un alto porcentaje de electores provenientes del sector rural “bajen” a la ciudad y desfilen ante los diferentes centros educativos donde previamente ya se han tomado todas las previsiones y se instalen las mesas de sufragio.
El traslado del material electoral a las distintas provincias cajamarquinas se cumplió escrupulosamente y rodeado de máxima seguridad.
A su vez, tanto las fuerzas policiales como del Ejército encargados de cautelar el orden durante el horario de la votación, se han encargado de asegurar a la población que cumplan con serenidad su deber cívico, pues ellos serán celosos guardianes que todo marche con normalidad.
Estos últimos días en Cajamarca, existe una creciente expectativa por conocer al final de la jornada electoral los resultados, porque en consideración de la mayoría quien resulte ganador será por estrecho margen en estas elecciones generales las más reñidas de la historia republicana.
