El presidente de la Región Cajamarca, Gregorio Santos Guerrero, negó que haya recibido cartas del Grupo Norte, que agrupa a la mayoría de empresas mineras, buscando una reunión con su persona, y en respuesta a ello, advirtió que los tiempos de los privilegios para ellos, se terminó, porque quien manda en Cajamarca, es él, y no los mineros.
“No he recibido cartas personales de ambos funcionarios (Raúl Benavides y Carlos Santa Cruz), sino algunas comunicaciones a fin de buscar una reunión para saludarnos con motivo de la elección, sólo de Yanacocha invitándonos a visitar sus instalaciones”, refirió.
Estamos dispuestos a conversar –apuntó- lo que ocurre es que antes se han sentido con enormes privilegios y en la administración pública uno lucha porque no hayan privilegiados, sino como el campesino de cualquier rincón llega con cualquier alcalde y sea recibido.
Seguramente en algún momento el gobierno regional considerará conveniente convocar al diálogo con las empresas mineras, acá es el gobierno regional quien dispone.
“Goyo” Santos, recordó a La República, que desde que asumió la presidencia han tenido una asamblea nacional de presidentes regionales, luego vinieron a Cajamarca, y ahí conversaron; pero el tema minero no es tema de Cajamarca solamente es un tema nacional, no puede emprender cosas independientemente de Junín, Huancavelica, Pasco, Ica, o de Moquegua, la política de las actividades productivas son nacionales, tienen leyes nacionales, y ellos deben tomar acuerdos en conjunto. “Como presidente regional me corresponde buscar consensos con los presidentes regionales porque no pueden ser mis decisiones aisladas”, afirmó. Sorprendentemente, Santos, prometió que no se formarán bloques antimineros, porque en el Perú no existen antimineros, ni siquiera Ollanta lo es, nunca existió, sino que ponen calificativos, lo que reclama el país es una misión de estado de priorización de proyectos mineros, petroleros, en función de la estrategia nacional de desarrollo; lo que quieren la Confiep, y la Sociedad Nacional de Minería y Petróleo, es apropiarse de lo que más puedan, y de ganar tiempo para aplicar la política de hechos consumados y eso no puede tolerarse, un Estado planifica el desarrollo.
El máximo funcionario público, precisó que acá quieren conducir a los gobiernos de acuerdo a los planes de ganancia de las transnacionales y no es así, y lo que tiene que hacer Ollanta es sentar a los presidentes regionales, incluido los alcaldes, para formar un nuevo Acuerdo Nacional, y en función de ello puedan elaborar la agenda nacional y las políticas nacionales de qué proyectos hidroenergéticos, metalúrgicos, gasíferos, entran a la agenda nacional y que van a ayudar a mantener el crecimiento económico los próximos 20 años.
El gobierno nacional y los regionales –apuntó- estamos en la obligación moral de definir qué proyectos garantizan el crecimiento y la estabilidad económica y que no van, de lo contrario van a cargar de conflictos sociales a Humala y se pasará los cinco años tratando de resolverlos, a nosotros nos están obligando a priorizar los proyectos y atomizar el presupuesto público con lo cual no se llega a nada.
Anunció estar afinando con los técnicos cajamarquinos, las principales demandas regionales que presentarán cuando se reúnan con el presidente Humala.
