A raíz de la intoxicación masiva de un centenar de niños de la escuela N° 82311, en el caserío Redondo (Cajabamba), donde fallecieron tres estudiantes al ingerir alimentos proporcionado por el PRONAA, el Director Regional de Educación de Cajamarca, César Flores Berrios, anunció que por el momento todavía no se podrán reiniciar las labores académicas.
“Espero un informe médico que corrobore que los alumnos ya se encuentran mejor de salud al igual que los maestros para que puedan retomar las clases, considerando que más del 80% de ellos resultaron envenenados y no sólo los alumnos sino también los profesores que necesitan descanso por un determinado tiempo, es la recomendación que han hecho los médicos que vieron a los afectados por el envenenamiento masivo”, explicó el funcionario.
Agregó que la comunidad se organizará junto a las autoridades sanitarias para limpiar la escuela y la cocina y evitar de ese modo el contacto con utensilios, alimentos o zonas que tengan residuos de veneno y puedan empeorar la situación de salud de los niños; pues tenemos que prevenir que pueda haber complicaciones en los niños.
Tras la tragedia el centro educativo permanece cerrado por disposición de las autoridades que realizan las investigaciones del caso, conforme comprobó La República.
